Ven conmigo le dije.
Y le enseñé a dibujar abrazos virtuales que muchas veces reemplazaron la realidad, le enseñé a sentarse y esperar cuando la ciudad conspiraba para que llegue tarde y a revisar su celular por si lo necesitaba. Le mostré mi modo más sincero y le explique el porque de mi rechazo a la carne y aprendió a pedir pizza sin tomate. A compartir su bebida a la hora de la cena y esperar a que yo me levante de la mesa. Le enseñé a ignorar la lluvia cuando recién empieza a caer y a abrir la ventana para disfrutar el sol. Ven conmigo le dije y le mostré el amor a mi manera, y por amor él me enseñó el universo a la suya.
yo si voy
ResponderEliminarcuanto amor. hay afortunado?
ResponderEliminarAfortunada yo.
ResponderEliminarque hermosa micro beba, me ha encantado tia.
ResponderEliminarya, pero soy de Argentina. ¿Espérame no?
ResponderEliminarMuy hermoso todo esto.
ResponderEliminarQue alegría. Hermoso tu.
EliminarGracias por pasar a leerme un ratito.